Varios estudios demuestran que el ejercicio mejora nuestra salud mental.
El running, andar u otras actividades pueden ayudar a personas a deshacerse de los síntomas de la depresión. Ahora, un nuevo estudio publicado en la American Journal of Preventive Medicine sugiere que el ejercicio puede prevenir esta enfermedad en el futuro.
Investigadores de la Universidad de Toronto han llevado a cabo estudios durante 26 años en sujetos de todas las edades, y han concluido que incluso niveles bajos de movimiento, como paseos o pequeñas labores de jardinería, reducen las posibilidades de sufrir una depresión.
El estudio se llevó a cabo mediante el análisis de 30 casos. De ellos, 25 sugirieron que el ejercicio tiene una influencia directa en el riesgo de padecer esta enfermedad. Así, las personas que mantuvieron una escasa o nula actividad eran más propensas a mostrar signos de depresión, mientras que los que llevaron a cabo un nivel de actividad mayor eran menos proclives a caer en depresión a medida que envejecían, según George Mammen, coautor del estudio.
Asimismo, los investigadores establecen que pequeñas cantidades, en torno a los 20-30 minutos al día, de actividad a baja intensidad están asociadas con el descenso del riesgo de padecer depresión. Además, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades recomiendan 150 minutos de ejercicio moderado a la semana, como puede ser caminar a paso ligero, o 75 minutos de alta intensidad, como un entrenamiento de running.
“Si tú no eres físicamente activo, deberías empezar ya”, afirma Mammen, y añade que “solemos pensar que el ejercicio está enfocado a las pesas y como nos vemos, pero es además una forma de mantener una buena salud mental en el futuro”.